17/12/10

Stargate




Me da en la espina que este blog virará en otra dirección. Sin concesiones. Richard Hell dijo verdades como puños, igual que Wittgenstein. Muerte y vida juegan a las payanas en el mismo rincón. Se ríen a hurtadillas de las pajas mentales que antropos se monta con su logos disfuncional.
En fin. Que hay quienes venimos notando, desde hace tiempo, que el humano piensa una cosa y dice otra. Que el discurso esté manipulado no es ninguna novedad, lo que no vamos a consentir es que manipulen el nuestro. Cuestión de principios: principios que se enuncian tal y como son pensados. Esto podrá generar agresión, aunque no tanto como el discurso encubierto. O los cheques sin fondo que producen balazos. O esa retorcida costumbre de no opinar porque no conviene o me da pereza, aunque luego vayamos por ahí hablando de justicia social. El discurso se devora a sí mismo cuando no se sustenta en la acción.
Pretendo una escritura capaz de llegar tanto a la maruja con fregona como a los lectores de nuestro querido Wittgenstein. Seré ambiciosa, pero puedo permitírmelo porque ya no tengo más nada que perder. Los que más temen son los que más tienen que perder. Los que se ocultan será porque tienen algo que ocultar. Yo ni temo ni pierdo ni oculto: prefiero arrasar. Narcisa se divierte dando brincos: ¿qué importa lo que yo pretenda?
Estoy conociendo personas que creen en otra manera de vivir. Resulta jugoso conocer gente de carne y hueso. Dicen lo que piensan, y si nos les gusta algo también lo dicen y luego se van. Y tanto lo entiende una maruja como alguien que haya leído al vienés... ¿no es genial? Estoy tan emocionada con el descubrimiento que la semana pasada creí que había sido abducida. Así que me puse a dar saltos montada en el tímpano de una caracola. A jugar con una canica de goma por todo el salón mientras el resto cenaba.
Personas que dicen lo que piensan... ¡asombroso! ¿Será que he dado un paso dentro del Stargate sin darme cuenta, y he caído en la vereda donde en Nochevieja la gente sale con una copa de sidra a brindar con el vecino? ¡Alucinante! Resulta difícil definir el fenómeno, pero cómo os diría... y aunque no os lo creais (me cuesta teclear, se me enredan los dedos de la emoción): esta semana he visto gente mostrando sus heridas como hacen los niños con sus cicatrices. De veras. Y lo más conmovedor: ¡no hacen psicoterapia! Y lo que es todavía más perturbador: ¡pude mostrar las mías mientras jugaba a la comba y nadie me pidió dinero!
Ahora ya sé lo que es viajar en el tiempo y que las palabras salgan por la boca y no por el hueco de una axila. Ahora ya sé cómo es la democracia, papi: tiene forma de círculo abierto y una vez dentro nadie te pedirá que le masturbes el ego.
Igual creo que se trata de algún tipo de mutación. Esta gente no es completamente humana. O mejor dicho, sí lo es, y tanto, que no lo parece. Soy feliz.



Photo-post: Subbotin

14 comentarios:

Antonio Tello dijo...

Hallar el lenguaje que nos comunique, como quien canta una canción sin que el otro sepa "necesariamente" la letra y sin embargo le cauce emoción. Esto es Roxana, lo que justifica la voz de quien escribe.

Mercedes Thepinkant dijo...

Enhorabuena!! Me alegro un montón. Tu tienes mucho que hacer y ahora que has encontrado personas (que no gentes) de verdad vas a poder hacer muchísimo mas.
Besazos

CHINCHU-LYN dijo...

Se les nota en la cara cuando mienten, RAB, y sabés qué? no lo hacen por maldad: lo hacen por esa disfunción que nombrás. Yo creo que se la saben pero el ir de teóricos les sirve para reconciliarse con esa incapacidad.
Lo del albañil: el tipo vive con el viejo y no tiene hipoteca, deuda sí. Se comenta que se fue pudriendo de a poco como a una manzana que olvidan en una caja, que un día se agusanó y la palmó. Ya palmado él le daba igual palmar a otros palmados.
Saludos

Stalker dijo...

me quedé sin palabras.

Me adhiero a lo que dices y al fuego con que lo dices (aunque quizá adherir no sea el verbo: quizá sea celebrar, quizá habitar, quizá quemar, también, en el intenso fuego que se adivina en quien salta a la comba y está con esa intensidad)

esperamos ese viraje del blog que terminará de iluminar el frágil andamio o las mentiras sobre las que sustentamos este pactado régimen de visibilidad carcelaria...

un abrazo-sin (no sé lo que significa el "sin", pero debajo o al lado de él se insinúa el "con")

Anónimo dijo...

Yo estoy como Stalker: sin palabras.
Vaya, miento: las tengo, pero no sé si se corresponden con la amplitud de pensamientos que mueven tu post. ¿Pueden las palabras reflejar siempre el pensamiento? A veces no es por mala voluntad sino por ineficiencia, como dice más arriba el compañero chinchu. Tú dirás: yo no me refería a eso, me refería más bien otra cosa. A por ello, pues. Este medio es excelente para decir justamente lo contrario a lo que se piensa, será porque hay tiempo para pensar y los gestos no nos traicionan. El silencio y los rodeos en el discurso son tanto o más agresivos que la palabra de capa y espada (la tuya). Hay que ser valiente para responder a ciertos discursos, pero no ser valiente porque sí, sino para responder a ellos y no siempre se tiene ese valor. Creo. Suerte que -si acaso no es una ironía- hayas encontrado esas personas sin rodeos, intuyo, algo que hoy día es un tesoro. Y tú lo sabes.
S&M
Samuel

RAB dijo...

Samuel (te respondo por aquí) los comentarios siempre se publican... si llegan. Algunos quedan contenidos en el escritorio para ser moderados, que es tu caso (porque hace tiempo que no escribes). No tengo nada que añadir a tu comentario más que un rotundo SÍ. SÍ SÍ SÍ a veces hace falta valor!!! Somos humanos. El peligro es que de tanto rodeo corramos el riesgo de convertirnos en humanoides.
Stalk: aquí nos quemamos todos, hasta la Medusa se quema en su propio fuego.
Chinchu: no sé si mienten. El peligro estaría en que realmente se creyeran sus discursos, si mienten no resultan peligrosos.
Si, hormiga querida, se hace mucho más con personas que con entes...
Antonio, justamente por lo que dices se hace necesaria la coincidencia entre palabra y pensamiento, de otra manera, no podría provocarse la emoción. La emoción no lleva ropajes.

:+:+:+

Fackel dijo...

Yo conozco algún extraño caso en que el individuo dice lo que piensa y, oh sorpresa, también hace lo que dice y lo que piensa. No hay problema, esos casos están bajo control y la policía del pensamiento, de la disociación verbal y de la inacción hace un seguimiento cercano. No hay riesgo de que contaminen al resto de la grey. ¿O ya lo están haciendo?

RAB dijo...

jajaja muy bueno Fackel... :D
Yo a veces tengo la sensación de que soy como la novia de Terminator pero sin Terminator, y al cabo me quedo en la picota con un capirote en la cabeza mientras la grey enciende la hoguera y el resto aplaude. Si miro a mi izquierda o a mi derecha -y adelante o hacia atrás, no sea cosa que esto se aproveche para fines políticos- hay más novi@s con sus capirotes que me sonríen de lejos. Todos llevan un cartel agujereado por las piedras, que reza: LA CLASE MEDIA RECUPERA SU NIVEL HISTÓRICO DE FASCISMO (el cartel existe, ya ha dado la vuelta al mundo y lo colgó un amigo en su fb).
En fin, que si me queman ya reencarnaré. Cedo mi lugar a otra novia. Efecto expansivo, y poco importa mi persona en el asunto, porque mi soberanía va más allá de mí, llega hasta ti que eres la millonésima parte del gran poliedro, como yo y como tantos. Y de tu soberanía, a la mía. Ése es el secreto, creo, y no el librito con el lacre que venden en el Corte Inglés.
Tanto hablar de espritualidad pero nos encerramos en nuestras parcelitas, pues menuda ingenuidad...
últimamente ando rebotada con los espiritualitos y sus parcelas difusoras de ashrams por 50€ al día. Dicen una cosa, piensan otra y ni hablar de su acción virtual. Venden viajes para iluminarse por 2000€ en India, 10 días, en un hotel de lujo. Ofrecen "amor incondicional" por 100€ la sesión. Esa gente es tan peligrosa como el fascismo, es más: es su tentáculo más inquietante. La era de Acuario: embotellamos el agua de la Patagonia y luego se la vendemos a los autóctonos a un precio que no podrán comprar. Es asqueroso. Y que la clase media, empobrecida y resignada, lo consienta... pues qué quieres que te diga, a yugarla (esto ya lo he dicho 6 veces esta semana: tres por internet y tres fuera de internet. Fulero).
Habrá quien piense: ¿y qué tiene que ver Patagonia, los capirotes y los espiritualitos? Pues que lo diga, y nos reiremos a carcajadas. Que al vater se tira todo lo que sobra no es ninguna novedad: caldo viejo, caca, pis, y toda esa materia escatológica que no se dice porque queda mal. Lo dejo librado a la imaginación abyecta de sinceros y mentirosos. Ésta es una guerra genialmente planificada donde el arma mortal es la indiferencia y el miedo. El arma de destrucción masiva soy yo: me apunto a mí misma cuando predico lo que no podré cambiar, y además lo sé. Estábamos más jodidos de lo que pensábamos pero no queríamos saberlo porque las casas son bonitas y toda la miseria pasa fuera de mí. Mientras tanto seguimos predicando. Dando recetas para la salvación. Curando a la gente y dejándola, luego, tirada y que se busque la vida como sea, total yo ya he pasado lista a los pagos (y el otro a su karma).
Contaminemos, Fackel, contaminemos. La OMS afirma que en 2020 la depresión será la segunda causa de mortalidad en el planeta. ¿Cómo pueden pronosticar a la largo plazo sin haberlo planeado con anterioridad? Y así una lista que haría esta respuesta interminable. Mucha verborrea hoy.
:+

Anónimo dijo...

El Mercado piensa
El Gobierno dice
La Banca actúa
la santísima trinidad: tres personas y un solo Dios verdadero, todos unidos por el Vacticano.

S

hiniare dijo...

Las palabras dicen muy poquito, por eso yo escribo menos y no me fío del todo de lo que leo. Pero no creo que hayas escrito en vano “soy feliz”. Espero que esas palabras no sean más que un eco de algo mucho mayor y mejor.
Muchos besos,
h.

RAB dijo...

El cuarto poder, ¿verdad Samuel?
Hinaire, haces bien. Más que de las palabras es conveniente fiarse de los silencios. Una persona que hace mutis es que ha perdido la fe. Con respecto a la escritura, me atengo a Pessoa, pero hay que saber distinguir entre escritura y confesión, que no es lo mismo. Y como bien lo has pillado, lo que has leído en este post no es más que escritura con sarcasmo.
Besos :+

RAB dijo...

Me equivoqué: no sé en qué orden de poderes estará el Vaticano, pero seguro que el cuerto, no es.

Luis González dijo...

Divierte tu salto en el tímpano de la caracola y los que aquí nos arremolinamos disfrutamos del salto. Te robo un segundo el fuego para quemarme los dedos. Respecto a lo de decir lo que se piensa da susto (pensarlo) y pena (dudarlo de uno). En mi caso, tontiloco que soy y taradillo, tiendo a descubrir boquiabierto lo que pienso cuando lo voy diciendo.

Te sigo en el salto(para mirar tan solo, que no estoy para riesgos). Abrazo dicho

RAB dijo...

Decir lo que se piensa da susto y pena dudarlo de uno... ¡¡!! Magistral, LUG, como siempre :D Serías un buen compañero de juegos. Fíjate que la intención del salto era divertir con la boca torcida, pero hay quienes sabiéndose el torcimiento encuentran ecuaciones misteriosas y perfectas en la espiral de la caracola. Es como si vinieran incorporadas al ADN bufón del prota. Un hado bufón y caracola, qué bonito (y terrorífico).
Si lo dices a la vez que lo piensas, mi querido LUG, permíteme un abrazo de comba. Y prometo no apretar. Es un atrape para subirte al pedestal (ya sé que detestas esas cosas, peeeero) y hacer contigo un castillito.